Testimonio del estudiante José Tomás Palma

Hola todos y todas, hoy toca que pueda relatar mi experiencia escolar del año 2021. Recuerdo cuando el 31 de diciembre del 2020 todos deseábamos que el nuevo año trajera el fin de la pandemia, pero no eso no sucedió y llego marzo, con ganas de volver al colegio, a nuestras salas, a nuestras vidas y nada de eso fue posible.

Partimos con clases virtuales, pensaba que sería un año muy aburrido y así fue al principio, me aburría y distraía fácilmente, lo cual hizo que le perdiera interés a mis actividades escolares y sociales, incluso me sentí muy agobiado, me complicaba dormir e incluso expresar mis emociones. Además, seamos sinceros, mucho no contribuíamos con las clases, si bien nunca me molesto encender mi cámara, si era complejo poder opinar porque todos queríamos hablar a la vez. Poco a poco nos fuimos acostumbrando y logramos cerrar el primer semestre.

El segundo semestre cuando se implementaron las clases hibridas, se nos hizo complejo, los micrófonos ambientales que había en cada sala producían un eco que dificultaba nuestro aprendizaje, ya que si bien, nuestras profesoras se esforzaban, era muy complicado entenderlas, mis notas bajaron, lo cual, me genero estrés, por pensar que el problema era solo mío. Gracias a la profesora Iowanna, mi profesora jefa, más que seguir hablando del problema, buscamos una solución, investigamos alternativas y aunamos esfuerzos que llevaron a que esto cambiara.

Luego vendría lo mejor, tras muchas acciones de muchas personas, al fin llegaron las vacunas contra el COVID-19, una luz de esperanza para todos, con alegría recibí la noticia que podríamos volver a nuestras clases presenciales, si bien, en primera instancia era una semana por medio y grupos reducidos, eso ya era un gran paso. Hable con mis padres, ellos consideraron la idea de que yo vaya de forma presencial y después de discutirlo, logre ir y verdaderamente las cosas mejoraron, al fin entendía lo que decían mis profesores y me reencontré con mis compañeros, compañeras y amigos; lo cual me alegro mucho. Después de ir a clases presenciales, el estrés que tenía ya no estaba y mis notas mejoraron y no solo eso, ya que también logré reforzar amistades y entablar nuevas, lo mejor de todo vino al cierre de año, fui elegido como mejor compañero de curso, lo cual obviamente me hizo muy feliz y agradezco a cada uno de ellos y ellas, ese gesto tan especial para mí.

Quiero, además, agradecer de manera pública a cada una de mis profesoras y profesores, se habla en Chile que el personal sanitario ha sido la primera línea en la lucha contra este virus y por tal razón unos verdaderos héroes, sin duda lo son. Pero no olviden algo, las personas que nos han educado en esta pandemia también merecen ser llamados héroes, han estado dando al máximo para que aprendamos, recuerdo a las que durante el periodo virtual debían muchas veces postergar el cuidado de sus hijos para apoyarnos, las que vieron sus voces afectadas para que las escucháramos y aquellas que debieron hacer cuarentenas preventivas por exponerse. Sin duda, son héroes y heroínas, ellas y ellos, todos los miembros de nuestro colegio, Rector, Inspectores, Enfermera, Auxiliares (Grande Betito), Porteros, Choferes, Tías de los buses y Palomo (que esperamos con ansias pueda acompañarnos el 2022), incluso yo y todos mis compañeros y compañeras, que tal vez hoy no entendemos todo lo que ha implicado este tiempo, pero estoy seguro que de grandes lo apreciaremos muchísimo, por los sacrificios y esfuerzos que hemos llevado a cabo para seguir adelante Construyendo Futuro y llevando nuestros valores de fraternidad, solidaridad, libertad e igualdad, reforzados por la experiencia vivida. GRACIAS A TODOS Y TODAS. GRANDE COLEGIO CONCEPCIÓN.

José Tomás Palma Ávila

Estudiante del 7°A

Colegio Concepción