Conmemoración Combate Naval de Iquique

¡Muchachos: la contienda es desigual, pero ánimo y valor.
Nunca se ha arriado nuestra bandera ante el enemigo
y espero que no sea ésta la ocasión de hacerlo!

Arturo Prat, 21 de mayo de 1879

Los conflictos están presentes en la historia de la humanidad desde los comienzos de esta, vienen acompañados de una naturaleza ambivalente; y este es el caso lo realizado por Arturo Prat Chacón, en el Combate Naval de Iquique, el 21 de mayo de 1879.
Con una arenga que está presente en los chilenos hasta el día de hoy, Arturo Prat Chacón se ganó un lugar único en la historia de Chile. Era el 21 de mayo de 1879, los primeros días de la Guerra del Pacífico. Prat era entonces un marino de treinta años que estaba al mando de la corbeta Esmeralda. Las circunstancias que rodearon a Prat fueron las que van dar a este joven capitán el estatus de héroe nacional. Hay que tomar en cuenta que dirigía una corbeta que no estaba operativa, motor en mal estado y desactualizado, sus cañones casi ninguno operativo y además de una tripulación joven y sin experiencia en combate. En este complejo panorama es que la desigual correlación de fuerzas fue evidente desde el comienzo del combate. Sin embargo, premunido de su espíritu de sacrificio y de la certeza de la importancia de su gesto para el desenlace de la guerra, Prat decidió no rendirse. Alentando a sus hombres y exclamando ¡Viva Chile!, saltó al abordaje del monitor peruano Huáscar, donde encontró la muerte.

Este acto de valentía y patriotismo no solo será el de un gran héroe, además subraya la figura de un Prat como modelo humano digno de admirar: esposo fiel, un padre preocupado, un hombre de esfuerzo que logra compatibilizar su carrera en la armada con terminar sus estudios de Derecho en la Universidad de Chile.

Su heroico acto nos invita a reflexionar, hasta nuestros días, respecto del Patriotismo bien entendido en toda nación que se construye día a día.